Para la familia las vacaciones constituyen la época más esperada del año, puede ser a la vez, una gran inversión de tiempo para mejorar diversos aspectos de la convivencia, como también del clima familiar. Algunos autores señalan que las vacaciones pueden ser un tiempo de estrés para los padres, ya que son los responsables de incurrir en gastos, a veces representativos, vinculados a actividades especiales de los hijos, a fin de que inviertan bien el tiempo que disponen; sin embargo esto tiene solución con una buena planificación de actividades basada en: incluir las preferencias de todos los miembros de la familia, itinerarios acordes a las edades de los hijos y un  ahorro prudente durante todo el año.

A continuación presentamos algunas alternativas a seguir para que las vacaciones familiares sean exitosas:

1. La planificación del tiempo: a pesar de que los hijos tengan dos meses de vacaciones,  los padres no cuentan con el mismo tiempo disponible, para ello es recomendable la coincidencia de fechas del periodo de vacaciones de los progenitores, para compartir y disfrutar del mayor tiempo posible juntos.
2. Los itinerarios: deben coincidir con las preferencias de todos los miembros de la familia,  parece una tarea difícil de cumplir pero no imposible, esto se soluciona fácilmente adjudicando a un responsable cada año, para que busque los mejores lugares a visitar.
3. La flexibilidad: las vacaciones no únicamente son un cambio de rutina y descanso, sino también una prueba de humildad, tolerancia y flexibilidad,  para atrevernos a cambiar nuestro estilo de vida con: comida novedosa, diferentes lugares de descanso y especialmente esos momentos que nos permitan desconectarnos de la tecnología.
4. Fuente de aprendizaje: cada experiencia es un aprendizaje continuo con  nuevas formas de vida, culturas, costumbres y hasta lecciones de historia, geografía y de ciencias naturales que transforman tu manera de pensar y actuar frente al medio ambiente.
5. La alegría y la diversión: deben estar presentes en todas las vacaciones, las actitudes positivas de los miembros de la familia para emprender los nuevos caminos que se presentan en este lapso, y que propiciarán que el tiempo compartido sea inolvidable.

Por ello,  las vacaciones son  el mejor tiempo invertido en familia, pues permitirá un reencuentro con cada uno de los miembros, descubriendo gustos, preferencias y especialmente observando cómo han crecido nuestros hijos y han desarrollado cualidades que muchas veces desconocíamos. Las vacaciones, tiempo de colaboración e integración familiar, dejando de lado las preocupaciones y angustias del día a día, tiempo de buscar nuevos retos, nuevas aficiones, compartir el tiempo con personas queridas y la oportunidad para el buen uso del tiempo libre, con entusiasmo y creatividad.

¡A disfrutar las vacaciones en familia!